Roma.-Los vientos del norte de África están elevando las temperaturas en el sur de Europa, en países como Italia y los balcánicos.
Ocho ciudades italianas han emitido alertas de calor, y los expertos temen que este pueda ser el año más caluroso jamás registrado, superando el récord anterior de 48,8 °C en 2021.
En España también comienzan a subir los termómetros, coincidiendo con el comienzo oficial de un verano que la Agencia Estatal de Meteorología pronostica más cálido de lo habitual.
El calor afecta drásticamente a la vida cotidiana en Europa, y las ciudades de todo el continente están tratando de adaptarse al aumento de temperaturas. En Londres, el profesor de Fisiología Lewis Halsey y su grupo de investigación en la Universidad de Roehampton miden lo que le sucede a nuestro cuerpo cuando sufrimos agotamiento por calor.
«Si se superan los 40 °C, entraremos en una zona de riesgo. Algunas personas estarán bien y otras no. Pero aquí es donde empiezan a surgir los problemas. Los órganos del cuerpo pueden empezar a fallar o al menos empezar a funcionar de forma menos óptima. Las razones de esto pueden ser lo que se llama desnaturalización de proteínas. Entonces la forma de las proteínas comienza a cambiar y algunas de ellas empiezan a separarse».
La combinación de calor y humedad también presenta sus complicaciones. Cuando ya hay demasiada agua en el ambiente debido a la humedad, nuestro sudor no tiene adónde ir y se escurre de nuestro cuerpo en lugar de evaporarse, por lo que se reduce la capacidad de reducir el calor corporal.
Halsey explica en ese sentido que «la principal forma en que nuestro cuerpo pierde calor o deja de aumentar la temperatura en un ambiente caluroso es mediante la sudoración», que es una cualidad que sitúa a los humanos «entre los mejores, en términos de secreción de sudor, del reino animal».
La semana pasada, las autoridades griegas se vieron obligadas a cerrar la Acrópolis cuando las temperaturas superaron los 40 °C, y en Turquía las temperaturas en la costa estaban 12 grados por encima de los estándares estacionales.
En España, el comienzo oficial del verano astronómico anoche viene acompañado este viernes de un aumento de temperaturas, y la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) publicó el miércoles un balance de la primavera, que describió las temperaturas en el conjunto del país durante la estación como cálidas en su conjunto, con un 0,7 °C por encima del promedio del período comprendido entre 1991 y 2020.
Y, aunque en junio el calor no ha alcanzado hasta el momento cotas muy agobiantes en buena parte de España, el verano viene acompañado de malos presagios, con la AEMET advirtiendo que los meses de julio, agosto y septiembre serán «muy probablemente» más cálidos de lo normal en todo el territorio nacional.Euro News.