Un nuevo cargamento de albúmina e inmunoglobulina llega al país, gracias al convenio con hemoderivados del Ministerio de Salud Pública con la Universidad de Córdoba, Argentina. El valor total de los medicamentos es de G. 9.075.882.000, que equivalen a USD 1.165.000.
La cartera sanitaria recibe el importante cargamento de medicamentos y plasma proveniente del laboratorio de hemoderivados de la Universidad de Córdoba, con el que mantiene un convenio desde el 2015.
Comprende 5.071 frascos de albúmina y 1.098 frascos de inmunoglobulina de 5 gramos, explicó la Dra. Amanda Carolina Molas, directora nacional del Programa de Sangre.
La ministra de Salud, María Teresa Barán, expresó su apoyo para seguir mejorando y aumentando la producción de plasma, con planes a futuro para el fortalecimiento de este convenio, indicó la Dra. Molas.
La cartera sanitaria informa que el plasma excedente producido en nuestro país es enviado al laboratorio del ente universitario, como materia prima para la producción de medicamentos. Gracias a la técnica NAT para el estudio de la sangre, se aumentó la seguridad sanguínea y se espera recibir mayor compensación por cada kilo de plasma recibido.
Este cargamento está destinado exclusivamente al Ministerio de Salud, que distribuirá según las necesidades de cada hospital.
Este importante envío representa un valor significativo para el país, no solo en términos económicos sino también en la mejora de la atención médica para los pacientes que requieren estos medicamentos.
El Ministerio de Salud celebra la llegada de medicamentos hemoderivados como retribución por la exportación de toneladas de plasma sanguíneo a la Universidad Nacional de Córdoba (Argentina).
La inmunoglobulina endovenosa se emplea en pacientes con diversas condiciones como inmunodeficiencias primarias, enfermedades hematológicas e inflamatorias, trastornos neuromusculares y para tratar ciertas infecciones. En tanto que la Albúmina Sérica Humana se utiliza en pacientes con cirrosis hepáticas, desórdenes gastrointestinales, edemas asociados a hipoproteinemia, entre otros.
Este importante intercambio demuestra cómo el trabajo articulado y la eficiencia pueden converger para beneficiar a la salud de la población, marcando un precedente positivo para futuras colaboraciones internacionales en el ámbito de la salud.